A lo largo de las últimas dos décadas y del trabajo constante por parte de la Red Nacional de Bancos de Sangre liderada técnicamente por el Instituto Nacional de Salud, se ha incrementado la donación voluntaria de sangre en Colombia. En 2004, la donación voluntaria representaba el 55,5%, una donación que se basaba en la motivación de los familiares de los pacientes, y que por tanto equivalía a 44,5% del total de donantes que acudían a la donación de sangre porque su familiar requería de ello para su tratamiento médico.
En 2024 la donación voluntaria y el deseo de dar vida a otros seres humanos sin importar raza o región, representa el 93,8% de la donación total, con tan solo 6,2% de donantes bajo la motivación de algún familiar que requiera de este biológico. Colombia es uno de los pocos países de América Latina con una donación voluntaria superior a 90%, sin embargo, se requiere incrementar los esfuerzos para aumentar también la donación voluntaria habitual, que antes de pandemia representaba casi el 33% de la donación total, y pese a los esfuerzos que todos los bancos de sangre efectúan, no logró para 2023 superar el 27%.
Giovanny Rubiano García, director general del INS, “La donación voluntaria y frecuente con fines altruistas, con el propósito de salvar una vida o mejorar la vida de otros es lo que nos debe movilizar alrededor de la donación de sangre en Colombia. Gracias a la coordinación técnica de la red nacional de bancos de sangre que se hace desde el INS, la donación voluntaria muestra un crecimiento en los dos últimos años. Queremos en este 2024 superar el millón de donantes, pero también seguir promoviendo la donación frecuente, al menos dos veces cada año. Recordemos la importancia de donar de manera frecuente y con el fin de salvar una vida”.

Fuente: INS


